La evaluación es un elemento fundamental en cualquier proceso de aprendizaje. Es una herramienta que bien utilizada puede enriquecer y dar valor al aprendizaje de cualquier materia.
Sobre este tema, se también se habló en el III Congreso Europeo de Flipped Classroom celebrado en Madrid. Si no recuerdo mal, fue Raúl Santiago quien lanzó la idea de que cuando un alumno sabe defender un punto de vista, sabe crear y por lo tanto domina el tema que está trabajando. Dicha afirmación me hizo recordar una actividad que realicé hace algún tiempo con mis alumnos de economía de 1º de bachillerato y que rescataré a continuación.
La actividad
Esta actividad se realizó con la unidad didáctica del mercado de trabajo y su objetivo era precisamente conseguir que los alumnos fuesen capaces de defender argumentos sobre un caso. La idea partió del principio de que si un alumno es capaz de argumentar, defender y hacer entender a sus compañeros un tema, podemos considerar que el alumno ha asimilado y domina el tema en cuestión.
Otro objetivo de la actividad, era realizar una monitorización evaluativa, de todo el proceso en sus diferentes fases.
Para realizar la actividad, se crean 6 grupos. A cada dos grupos se les asigna el visionado de un vídeo que trate un tema de opinión sobre el que se pueda debatir a favor o en contra. En total 3 vídeos.
Los integrantes de cada grupo, ven de manera individual el contenido del vídeo. Como trabajo adicional en casa, deben anotar en un Padlet las ideas y/o argumentos que han extraído del visionado del vídeo. Ese Padlet es diferente para cada grupo, para que los miembros del mismo puedan interactuar entre sí, pero el resto de grupos no sepan lo que están trabajando. La aportación de cada integrante se registra con su nombre y apellido. De esta forma, al ser yo miembro de cada uno de los Padlet, puedo realizar desde casa un seguimiento mejor de las aportaciones que hace cada alumno durante esa tarde y ver el grado de comprensión del vídeo. Esta es una primera evaluación, en este caso individual.
El objetivo de este muro virtual es recoger los argumentos a favor y en contra del caso planteado. Los dos, porque los alumnos no saben qué postura les va a tocar defender al día siguiente.
Al día siguiente, por tanto, se sortea qué debe defender cada grupo, a favor o en contra. Destinamos toda la sesión a preparar el debate, ampliando los conceptos que ya vieron en el vídeo, con búsqueda de nueva información, material gráfico para apoyar los argumentos, etc. Este es un momento privilegiado para observar el trabajo de los grupos y sentarse con ellos para ver cómo están planteando y argumentando su defensa. En este punto la orientación del profesor es fundamental para ayudarles a enfocar bien el tema. Además un par de componentes del grupo se encargan de redactar 10 preguntas sobre el caso que les ha tocado defender, que me entregan al final de la sesión.
Evaluar las preguntas que un alumno o un grupo de alumnos realiza, creo que es un aspecto evaluativo importantísimo, porque da medida del grado de comprensión del tema.
En una segunda sesión de clase, los grupos defienden sus argumentos frente al grupo que tiene su mismo caso. Cada debate dura unos 20 minutos. El resto de equipos toman apuntes. Los grupos se van alternando en estas labores, tal y como figura en la infografía adjunta.
Estos debates, son evaluados mediante una rúbrica, que reproduzco a continuación. Es una evaluación grupal, ya que todos han contribuído a la búsqueda de material y a la creación de argumentos.
Finalmente en una tercera sesión, realizamos una prueba en Socrative con todas las preguntas válidas que han redactados los alumnos. Esta es una evaluación individual que me sirve para ver no solo el grado de comprensión del caso que les ha tocado defender, sino también del caso de los demás grupos, convirtiéndose de esta forma en una actividad de Peer Instruction.
A modo de conclusión
Respondiendo a la pregunta del título de este post, creo que es necesario evaluar todos los procesos cognitivos significativos que generamos en nuestras aulas, con el fin de que no se conviertan en una sucesión de actividades con las que llenamos el tiempo de clase.
El proceso evaluativo descrito en esta actividad, puede servir como instrumento de calificación. Sin embargo, creo que es mucho más útil como instrumento de diagnosis de la asimilación de conceptos y como herramienta fundamental para guiar el proceso de aprendizaje de nuestros alumnos.
Como he señalado anteriormente, cuando un alumno es capaz de exponer contenido complejo y argumentarlo coherentemente y con elementos de apoyo significativos que previamente ha organizado y clasificado, podemos asegurar que ha asimilado el tema y lo domina. Si además es capaz de evaluar el conocimiento de sus compañeros con preguntas relevantes…
José Julián Prieto
Coordinador TIC y profesor de Economía e Informática
Colegio Santa Teresa – Pamplona